El otoño es una época de reflexión y nuevos proyectos. Aún hoy, tengo la impresión de que el año comienza ahora, y no el 1 de enero. El nuevo curso " escolar " es uno de los mejores momentos del año para plantearse nuevos retos, nuevas actividades, nuevas prioridades en nuestras vidas. Un punto de inflexión que marca un nuevo comienzo. El otoño evoca una nostalgia especial, esos paisajes de árboles empezando a desnudarse, esos días cada vez más cortos, esas temperaturas que invitan al recogimiento , pero a la vez nos marca un nuevo inicio del ciclo vital.
¿Qué tenéis en mente para este otoño? Danza, yoga, leer, dedicar más tiempo a la familia y amigos, terminar esa reforma en casa que nunca se llega a materializar.... y ¡Nuevos proyectos de ganchillo, espero!
Una vez terminadas las vacaciones, y con la vuelta a la rutina más que asumida... nos queda todo el otoño e invierno para ir terminando estos proyectos que tenemos en mente, y que luego no nos quede la sensación de no haber dedicado el suficiente tiempo a nuestra afición favorita.
Tras muchas tardes tejiendo acompañada de un té o limonada bien fresquita, mi colcha de grannys y flores ha avanzado bastante. Así estaba a mediados de julio ....
Y así está ahora .... ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡La mitad ya terminada!!!!!!!!!!!!
Creo que es muy bonita y alegre, aunque, lleva muchísimo trabajo, no os voy a engañar. Hacer y unir todas las flores es trabajoso, pero el resultado, sin duda alguna, va a merecer la pena.
Este va a ser sin duda mi primer proyecto, pero hay más : quiero terminar un cojín de flor que dejé aparcado y hacer otro más de franjas horizontales. Y por supuesto, dedicar más tiempo a este blog que se queda en ocasiones abandonado por semanas enteras... ¡¡¡¡Os mantendré informados!!!!
